Todos hemos oído en alguna oportunidad a través de los medios de noticias o de documentales, sobre la problemática que se erige en Palestina y sus territorios ocupados por Israel.
A 30 kilómetros de Jerusalén, en dirección a Belen (osea al sur) se encuentra Hebron, uno de los puntos más notables de la resistencia pro-palestina en contra de las ocupaciones de Israel.
El 25% aproximadamente de la superficie de Hebron, esta ocupado de manera arbitraria por colonos y el ejército de Israel.
Evidentemente Hebron no es un lugar frecuentado por turistas, las revueltas constantes y los enfrentamientos de locales con las fuerzas armadas israelíes, hacen de esta ciudad, un lugar no seguro para conocer y disfrutar de los más hondo del mundo arabe.
A pesar de sus problemas, tiene una gran actividad comercial, sus calles están llenas de negocios. Se puede encontrar absolutamente todo lo que uno se pueda imaginar. Es sabido que los árabes todo compran y todo venden, y en base a eso gira la vida diaria y también la economía.
Es común escuchar las ofertas de lo que venden a los gritos y de los que usan megáfonos.
Las tiendas de ropas abundan y son frecuentadas sobre todo por mujeres muy bien arregladas. (Las mujeres árabes tiene una gran obsesión por estar siempre impecables, inclusive aunque no se les vea los vestidos que llevan debajo de sus atuendos, o los peinados cubiertos por el velo)
Es normal toparse en ciertas ocasiones con jóvenes dando vueltas o yendo en dirección hacia algún destino, subidos en camiones, agitando banderas y entonando cantos por una Palestina libre para que los Israelíes se marchen de las tierras ocupadas. Da un poco de escalofrío ver eso sinceramente, en estos lugares nunca se sabe que puede llegar a pasar.
Adentrarse en Hebron es oler un poco a radicalismo, es sentir miradas desconfiadas, es hacerse un poco esas películas que uno se hace cuando viaja.
Lo bueno, es que siempre hay alguien dispuesto a explicarte que es lo que pasa, como se sienten cuando alguien se les mete en la casa y la necesidad de ser visitados.
Hebron, la aventura, un grito de rebelión, sus pro y sus contras, su gente y sus luchas.
Si en algún momento el pensamiento es viajar a Palestina, la conocerá aquí, uno de sus lugares más auténticos.